Antes de cualquier cosa debemos instalar un cliente de la base de datos a la que vayamos a acceder de forma remota.
Hecho esto, las conexiones las vamos a gestionar a través del proveedor de datos de Windows, el
ODBC (Open Database Connectivity): Panel de control -> Herramientas administrativas -> Orígenes de datos ODBC.
Una vez en el administrador de datos de ODBC, veremos una ventana parecida a la siguiente:
[attachment=1:1s3624j8]adminODBC.jpg[/attachment:1s3624j8]
Ahí ya decidimos dónde queremos añadir nuestro origen de datos, si en el
DSN (Data Source Name) de usuario, sistema o archivo (fijaos en la explicación en la parte inferior de la ventana para decidir cuál os conviene más). Una vez os decidáis, le dais a "Agregar..." y seleccionais el controlador/driver de la/s base/s de datos que corresponda/n:
[attachment=0:1s3624j8]adddriverODBC.jpg[/attachment:1s3624j8]
Después de seleccionarlo también lo podéis volver a configurar con el botón de "Configurar..." (¿ah, sí?). Es importante recordar el nombre que le hemos puesto a nuestro origen de datos. También suele ser necesario configurar el propio cliente de la base de datos para definir la conexión y demás (IP y puerto del servidor, por ejemplo). Ahí consultad la documentación de vuestra base de datos.
Una vez hecho esto, hay que preparar el entorno de Visual Basic 6 para poder definir los tipos que nos ofrece ADO.